CUANDO LAS IDEAS NO SE PUEDEN APRESAR

Caracas, 12 de septiembre de 2014

CUANDO LAS IDEAS NO SE PUEDEN APRESAR

LIBERTAD PARA LOS PRESOS POLÍTICOS EN VENEZUELA

Hoy es viernes y me enteré que donde se encuentra cautivo injustamente mi hermano Vasco Da Costa, simplemente por decir lo que piensa, por escribirlo y por no estar de acuerdo con la situación actual del país, hubo una requisa en la que los dejaron con lo que tenían puesto.

Al ver toda esta situación me pregunto cómo alguien puede creer que puede eliminar la libertad de pensamiento, cómo alguien puede creer que puede obligar a otros a adoptar sus pensamientos. Las ideas son libres como el viento y cuando alguien tiene una convicción en algo, su pensamiento se vuelve como la sombra para su perseguidor, mientras más tratas de alcanzarlo más se escapa, mientras más huyes de ellos más te persiguen, lo que quiero decir, es que mientras más nos persigan por nuestra forma de pensar, más afianzan nuestras ideas.  

Vasco Da Costa no puede escribirles tampoco hoy, porque continua preso, pero sus hermanos estamos aquí para transmitir sus pensamientos: “Desde mi cárcel política y como preso de conciencia, veo como la Revolución Bolivariana está mostrando su debilidad y como está autodestruyéndose dentro de su ineptitud, no sólo porque están endeudando el país para poder enfrentar sus obligaciones, sino porque tratan de crear una ilusión de que la Revolución es viable y democrática.

Las revoluciones al estar débiles y lentas, es cuando hay que implementar los mecanismos para erradicarlas. Triste Revolución de ineptos que tratando de crear la ilusión, nos darán las condiciones para poder hacer que la opinión pública tenga las herramientas necesarias para extirpar el cáncer comunista de nuestra sociedad” (El Rosal, Comando de Captura del CICPC, septiembre del 2014)

EL Movimiento Nacionalista con Vasco Da Costa y el General Raúl Isaías Baduel a la cabeza es la sombra que atormenta al socialismo, es por eso que el régimen trata a toda costa de anular su influencia, porque saben que su salida constituyente es la solución para que la sociedad consiga librarse democráticamente de la maldición socialista.

Está escrito que Dios oirá al perseguido injustamente en su clamor y el pecado del verdugo no será olvidado, triste revolución que piensa que las ideas se pueden apresar. 

Ana María Da Costa